La selccion española se pase por venezuela
Venezuela está intentando que el término 'pelotero' no se aplique únicamente a sus jugadores de béisbol. La evolución de su balompié se va afirmando frente a los rivales clásicos del continente americano, pero no da aún para inquietar a la campeona del mundo, incluso en un momento de dudosa motivación para los españoles. El entusiasmo de los fanáticos de 'La Vinotinto' se trasladó al piso del Olímpico General José Antonio Anzoátegui, pero hay muchas lecciones del libro del fútbol que aún no han estudiado. César Faría, el seleccionador, ha trazado un plan ambicioso y ha probado alrededor de 60 jugadores para su proyecto, cuya prueba inmediata del éxito o el fracaso no estaba en este amistoso, sino en la Copa América del mes de julio, donde está encuadrada en un `'grupo de la muerte' con Brasil, Paraguay y Ecuador.
Los dos tiempos arrancaron con jugadas de extremo peligro sobre la meta de Víctor Valdés. La escasa resistencia inicial de los españoles frente a los empujones, carreras y remates de Lucena, Orozco y Maldonado, respectivamente, provocó que los primeros minutos resultaran inquietantes. También el sábado, antes del éxtasis futbolístico de Foxboro ante Estados Unidos se vivieron extrañas sensaciones de inferioridad. Esta vez, la exhibición se hizo esperar tanto que jamás llegó. Pongan el calor y la humedad de las cuatro de la tarde caribeñas como excusa.
En Puerto La Cruz, la iluminación de España rozó la penumbra, pero a cambio encendió el gol con chasquidos aislados, pelotazos que el portero venezolano no acertó a descifrar. Villa anudó su 47ª diana internacional con un libre directo a 35 metros del atropellado Reny Vega a los cinco minutos, Pedro culminó un ataque por él comenzado con un taconazo frente a la impericia defensiva venezolana y Alonso triplicó los males de Vega con otro zapatazo entre la descolocada barrera 'bolivariana'.
Los seis cambios de la selección respecto al 'bolo' estadounidense se centraron la portería, la defensa y el ataque. Valdés, Iraola, Marchena, Iniesta y Llorente refundaron la alineación titular. Pero sólo el guardameta, en el primer minuto y en varias fases de una segunda parte color vino, dijo hola. El resto se dejó llevar por la manija doble del par Alonso-Busquets y los chispazos de Villa o Pedro. La referencia de Llorente anduvo siempre muy confusa en el mapa que manejó España.
En Venezuela lució la perla del Mundial Sub 20, Orozco, que a los 19 años tiene pinta de líder. Algo de Maldonado en los desmarques y una temprana violencia cortada de raíz por el arbitraje, que no tardó en amonestar a Chichero y a Lucena. Tras el descanso, los conocidos 'españoles' Arango y Miku ofrecieron alternativas de ataque más potables, las que apenas llegaron a tener los españoles (Torres volvió al fallo). Los internacionales de Faría encontraron posiciones muy favorables para fijar la heroicidad de marcarle un gol a la mejor selección del mundo. Rondón, el colosal artillero del Málaga, anda lesionado.
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